Paneles solares
De nada sirve tener las mejores baterías del mundo si no tenemos como darles de comer. Las placas o paneles solares son nuestras mejores amigas a la hora de buscar la mejor autonomía eléctrica en nuestra autocaravana o casa.
En la entrada anterior en la que hablamos de las baterías les contamos que el tema de la autonomía eléctrica no es tan simple como parece a primera vista, por eso, decidimos dividir el asunto en tres, y hoy toca hablar de las placas solares.
Para quién no esté familiarizado con el tema, las placas solares sirven para convertir la energía del sol en eléctrica y de esta manera poder autoabastecerse. En el caso de las casas (las normales, no las que tienen ruedas) uno podría hasta prescindir de las baterías y el excedente de energía generada se puede volcar a la red eléctrica y (en teoría) cobrar por este exceso producción.
En nuestro caso, no hay excedente que valga, o por lo menos, nadie nos va a pagar, ni dar las gracias. Pero no pasa nada, porque estamos bien solos, contemplando al mundo desde lejos, mientras disfrutamos de una buena taza de café.
¿Qué son y cómo funcionan las placas solares?
Las placas solares son, hablando claro, unas ventanas mágicas que transforman la luz en oro (porqué al precio al que estamos pagando el kilowatt estamos lidiando con los mismos valores) que nos va a hacer ricos y hasta el punto de poder ser vecinos de Elon Musk si así lo deseamos. Esto lo vamos a comprobar en el último párrafo de este artículo.
Ahora de verdad, las placas solares son un compendio de células fotovoltaicas que convierten la radiación solar en electricidad. Este invento no es nuevo, de hecho, la primera célula fotovoltáica en estado sólido se creó allá por el año 1883. Pero no fué hasta el inicio de la carrera espacial entre Estados Unidos y Rusia cuando se comenzaron a utilizar en la fabricación de satélites.
Las celdas están formadas por láminas de silicio que se envuelven en conductores metalizados que a su vez están cubiertos por una capa de vidrio. Cada celda tiene un polo positivo y uno negativo, cuando la luz del sol incide sobre la célula o celda solar, los electrones se excitan y se mueven de la capa negativa a la positiva, generando una corriente eléctrica.
Estas células fotovoltaicas están conectadas en serie en los paneles solares, lo que significa que la corriente eléctrica generada por cada célula se suma para producir una corriente eléctrica más grande.
Es importante aclarar que los paneles solares generan, dependiendo del voltaje del panel, que pueden ser 12, 24 o 48v de corriente eléctrica continua (CC) y nuestros electrodomésticos, lámparas o herramientas funcionan con corriente alterna (CA) por lo que vamos a necesitar un inversor que convierta esos 12 o 24 volts a 220/ 230v de corriente alterna.
Como dijimos antes, si nuestra vivienda es fija, podríamos prescindir de las baterías, pero no del inversor.
Monocristalina o Policristalina…esa es la cuestión.
Dentro del mundillo de las autocaravanas las placas solares utilizadas suelen ser de 12 o 24v, lo mismo para las baterías, reguladores de carga o inversores, y a su vez las hay policristalinas o monocristalinas, dentro de estas dos hay muchas variedades, pero vamos a intentar mantener el asunto simple.
La diferencia principal entre ambas es que las monocristalinas tienen una mayor eficiencia, sobre todo cuando la incidencia solar no es la óptima, y que son más caras que las policristalinas.
Pero con el paso de los años estas tecnologías se han hecho mucho más accesibles y podemos conseguir un panel solar monocristalino de 450w como el que tenemos nosotros por unos 150 euros.
Es muy común en las autocaravanas más “vintage”, por no decir viejas, vengan con paneles policristalinos de 12v y 100w, nosotros tenemos uno de estos y podemos decir que en un buen día, y con suerte, pueden generar unos 20w por hora, mientras que el otro panel genera unos 350w.
Sigamos el ejemplo de este hombre al que contratamos como modelo, luego de un extenuante casting, para que pose mostrándonos que hay que limpiar los paneles solares regularmente.
Los controladores.
Una vez que ya tengamos las placas elegidas toca buscar un regulador o controlador de carga que trabaje bien con el panel, los hay inteligentes y no tanto, como todo en esta vida. Es muy importante elegir un regulador que trabaje con el mismo voltaje que nuestros paneles. En nuestro casa, la placa original que vino con la Chancha es de 12v y 100w y la otra de 24v y 450w, por lo que tenemos dos controladores, uno para cada placa, que alimentan nuestra batería que es de Litio.
Cada regulador se encarga de gestionar de la manera más eficiente posible la carga de la batería, el de la placa grande además se encarga de convertir esos 24v a 12v. Desde su panel de control o app, dependiendo del modelo, podemos especificar el tipo de batería, ya que esto influye drásticamente en la manera que entregan la energía.
Y solo nos quedaría elegir un inversor…cosa que dejamos para un próximo post.
Entonces, empecemos a resumir
Es importante que una persona o empresa que realmente entienda del asunto nos asesore con respecto a nuestra futura instalación y consumos para poder exprimir de la mejor manera esos paneles y tengamos la autonomía deseada para nuestra casita, con o sin ruedas.
Pero les recomendamos que intenten contactar con un profesional que los asesore, nosotros recurrimos la gente de AUTOSOLAR, que no nos pagan por decir esto, ni nos hicieron ningún descuento a hora de comprar el inversor y los controladores, pero fueron muy profesionales y nos ayudaron mucho, así que los recomendamos.
Y en cuanto a eso de ser vecinos de Elon…para eso tiene ruedas nuestra casa, ¡solamente tenemos que plantar la Chancha enfrente de su choza y estamos!
